Aplaza juez indefinidamente sentencia de Trump por caso de Stormy Daniels
INDONESIA, 26 de diciembre de 2018.- Las autoridades indonesias pidieron a la población de las localidades cercanas al volcán Anak Krakatoa, evitar la costa, mientras que las erupciones y el clima están siendo monitoreados por los riesgos de un nuevo tsunami.
La agencia meteorológica de Indonesia (BMKG) informó que el mal tiempo alrededor del volcán podría hacer que su cráter sea más frágil.
«Hemos desarrollado un sistema de control centrado específicamente en los temblores volcánicos en Anak Krakatoa para poder emitir alertas tempranas», subrayó la directora de BMKG, Dwikorita Karnawati.
Una erupción en el volcán en el estrecho de Sunda provocó que una parte del cráter colapsara y se deslizara hacia el océano, desplazando una gran cantidad de agua y provocando olas gigantes tan altas como tres metros.
El clima extremo alrededor del volcán Anak Krakatoa en Indonesia podría desencadenar otro tsunami devastador, advirtieron los expertos, cuando la cifra de muertos por el desastre anterior se sitúa en 429.
Al menos otras 154 siguen desaparecidas y mil 485 resultaron heridas por el tsunami, causado por una erupción de Anak Krakatoa, que afectó las zonas costeras alrededor del estrecho de Sunda entre las dos islas más pobladas del país, Java y Sumatra.
El hecho de que el desastre haya tenido lugar durante la temporada de Navidad ha hecho recordar el ocurrido el 26 de diciembre de 2004, que dejó un saldó de más de 226 mil muertos en catorce países, incluidos más de 120 mil en Indonesia.
«Continuamos monitoreando las actividades del Anak Krakatoa, particularmente bajo el clima extremo y las olas altas porque tales condiciones pueden potencialmente causar el colapso del flanco del volcán, y desencadenar un tsunami», detalló Karnawati.
Las lluvias del miércoles fueron mucho más intensas que el día anterior y el mar todavía experimentaba marea alta y olas fuertes, dificultando los esfuerzos de búsqueda y rescate y retrasando las entregas de ayuda a aldeas aisladas y refugios de evacuación en las zonas afectadas.
«Nuestros equipos están viendo muchos huesos rotos y hogares rotos, y personas que están muy conmocionadas», puntualizaron fuentes de la oficina de gestión de desastres en la Cruz Roja de Indonesia.
Los equipos de rescate continúan este miércoles tratando de acceder a varias aldeas aún inaccesibles por carretera.
Miles de personas se alojan en carpas y refugios temporales, como mezquitas o escuelas, con decenas de personas durmiendo en el suelo o en instalaciones públicas abarrotadas.
Los rescatistas indonesios usan drones y perros rastreadores a medida que aumenta el número de muertos a más de 429.
La agencia reportó que cientos de residentes aún varados en pequeñas islas en el estrecho de Sunda, que separa a Java y Sumatra, serán transportados por avión o llevados en bote a los refugios.
El portavoz de la Agencia Nacional de Mitigación de Desastres, Sutopo Purwo Nugroho, indicó que la búsqueda de víctimas y posibles sobrevivientes se estaba expandiendo a las áreas periféricas que actualmente están aisladas por el desastre.
«Las víctimas pueden seguir aumentando … porque hay algunos distritos que no han sido accesibles debido a carreteras dañadas y puentes colapsados», dijo Sutopo, y agregó que el tsunami dañó miles de edificios, incluidos muchos hoteles.
Más de 16 mil personas fueron desplazadas de sus hogares y se necesitaba con urgencia equipo pesado en el subdistrito de Sumur cerca del Parque Nacional Ujung Kulon para que la ayuda fluya y llegar a las personas que podrían resultar heridas o atrapadas, dijo Sutopo Purwo Nugroho.
El desastre del sábado se produjo antes del aniversario del enorme tsunami asiático que azotó el 26 de diciembre de 2004, luego de que un terremoto de magnitud 9.1 frente a la isla de Sumatra generara enormes olas.
El gigantesco maremoto mató a unas 230 mil personas en una docena de países, la mayoría en Indonesia.