
Respalda Colegio de Arquitectos y Urbanistas obras del Centro tapatío
GUADALAJARA, Jal., 7 de agosto de 2025.- Por el 233 aniversario luctuoso del humanista y benefactor, Fray Antonio Alcalde, la presidenta de Guadalajara, Vero Delgadillo, encabezó una guardia de honor en la Rotonda de los Jaliscienses Ilustres, con el objetivo de reconocer su vida y obra.
En su mensaje, la alcaldesa destacó que la llegada del llamado “Fraile de la Calavera” a la Ciudad, fue un parteaguas en el desarrollo educativo, pues fundó la Universidad de Guadalajara; en la salud, al crear el Hospital Civil, y en la vivienda, con el albergue de “Las Cuadritas”.
“Su memoria sigue viva, también cuando nos recuerda que la generosidad, la humildad y el trato digno a las demás personas, tiene que ser la ruta en el servicio público, pero también en lo privado. Honro la memoria de Fray Antonio y agradezco que ese hombre haya tomado a esta casa Guadalajara como su casa”, dijo.
Delgadillo señaló que, si bien Fray Antonio Alcalde no nació en Guadalajara, es considerado como un hijo de la Ciudad.
“Quienes somos tapatías y tapatíos también llevamos en nuestra sangre, el trabajo, la memoria y la vida de Fray Antonio Alcalde; creo que estas historias no se pueden separar y es parte de la historia que nos da identidad a cada una y cada uno de los que estamos aquí”, indicó.
Subrayó que su Gobierno y el propio Palacio Municipal, lugar donde pasó sus últimos días el fraile dominico, conserva la vocación de cuidar a la ciudad y todos los días se da lo mejor para lograrlo.
“También vale la pena recordar que él nos convocó a tejer en comunidad. Las grandes obras que él hizo y encauzó, fueron por esas manos unidas, esos recursos unidos. La grandeza de esta ciudad se construye en comunidad y comunidad es el valor más importante para toda sociedad y Guadalajara es un lugar que sí nos representa y representa este valor”.
Por su parte, el sub secretario General del Gobierno de Jalisco y representante del Gobernador, Pablo Lemus, Francisco Ramírez Salcido, señaló que Alcalde llegó para forjar la identidad de la tierra jalisciense, guio y definió el camino para Guadalajara.
“Acciones y ejemplos positivos de la vida de Fray Antonio Alcalde son infinitos, Cada uno de estos nos lleva a reflexionar y seguir el ejemplo de su entrega en espíritu y alma por los más necesitados, siempre con la austeridad que lo caracterizó y su visión positiva de materializar todo lo que estuvo en su espíritu altruista”.
En la guardia de honor estuvieron presentes legisladores locales y federales, así como jueces, magistrados y representantes de la Universidad de Guadalajara, de los Hospitales Civiles, del Arzobispado de Guadalajara y de la Fundación Fray Antonio Alcalde.