
Mujer con antecedente de cáncer, primera víctima de gusano barrenador
GUADALAJARA, Jal; 30 de julio de 2025.- La doctora Ana Rebeca Jaloma Cruz adscrita a la División de Genética del Centro de Investigación Biomédica de Occidente (CIBO) del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en Jalisco, advirtió que el aspecto genético y otros factores se asocian al desarrollo de trombosis.
Dicha enfermedad ocurre cuando hay formación de coágulos sanguíneos que obstruyen la circulación, provocando afectaciones como dolor, inflamación de los tejidos y muerte celular, además de complicaciones graves en el corazón, pulmón o cerebro.
Explicó que en el CIBO ha desarrollado varias líneas de investigación para identificar los marcadores genéticos que intervienen para que se desarrolle este tipo de afectaciones.
“Esto se ha desprendido de una serie de trabajos encaminados a determinar factores genéticos en los trastornos de coagulación, y que se conocen hasta ahora por lo menos seis marcadores genéticos relacionados con la coagulación e involucrados en el desarrollo de una trombosis, siendo dos de ellos los más importantes”, detalló Jaloma Cruz.
Estos marcadores comentó, tienen la particularidad de provocar cambios como alteraciones en las proteínas que intervendrían en el proceso de coagulación sanguínea, ya sea incrementándola o bien, disminuyéndola.
Además explicó, que otros marcadores propician algunos aspectos en el sistema cardiovascular, como: procesos inflamatorios y disminución de la fibrinólisis (proceso para la degradación de redes de fibrina formadas durante el proceso de coagular la sangre en el organismo).
Refirió que además del aspecto genético, la trombosis es una alteración multifactorial en donde intervienen ciertos factores de riesgo, como: “sedentarismo, embarazos, enfermedades autoinmunes, uso de tratamientos hormonales e incluso el estrés pueden detonar el padecimiento”.
Finalmente, el riesgo aumenta en etapas como el embarazo y el puerperio, por lo que pidió estar atentos ante signos de alarma como: cambios en la circulación sanguínea, dolor de piernas, enrojecimiento o manchas en la piel y sensación de calor en extremidades.