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GUADALAJARA., 22 de junio de 2025.- La restauración de la Catedral de Guadalajara tras las pintas realizadas el pasado 8 de marzo ya se encuentra en su primera etapa, informó el cardenal José Francisco Robles Ortega, quien detalló que ya se eliminó la parte más visible de los daños.
“Ya quitaron lo más fuerte de las pinturas. Entiendo que falta profundizar con un método especial para eliminar los rastros”, explicó.
El Cardenal dijo confiar en que las autoridades tomen medidas preventivas ante futuras manifestaciones para evitar actos vandálicos, sin coartar el derecho a la protesta.
“Que se respete la libertad de manifestarse, pero también que se hagan esfuerzos para proteger edificios, instituciones y personas que no tienen relación directa con las causas de la marcha”, subrayó.
El plazo para concluir la limpieza aún no está definido, pues la segunda fase requiere tecnología especializada, de acuerdo con los informes recibidos por la Arquidiócesis.
Por otro lado, mencionó que el reciente nombramiento de un mexicano como responsable de la coordinación de los viajes pontificios representa un servicio valioso al papado, aunque aclaró que ello no significa que México obtenga privilegios por tener a un connacional en esa posición.
“No es cosa de influencias. No porque tengamos un mexicano ahí vamos a gozar de un privilegio. Deseamos que tenga mucho éxito en este servicio que la Iglesia le pide en favor del Papa”, expresó el arzobispo de Guadalajara tras la misa de este domingo.
El nombramiento, dijo, debe entenderse como parte de una misión pastoral para asegurar que las visitas del pontífice, en cualquier parte del mundo, se realicen de manera exitosa.
Finalmente, ante la reciente escalada de violencia en Medio Oriente y las tensiones entre Irán, Israel y Estados Unidos, Robles Ortega, hizo un llamado urgente a la oración por la paz y a construirla desde lo cotidiano.
“Es una situación lamentable por la escala de violencia que se está viendo. Esto es grave porque puede escalar más, comprometiendo a otros países”.
El cardenal pidió a los fieles ser constructores de paz en el ámbito personal, familiar y social: “La paz global que deseamos se fragua en el corazón de los hombres”.
También exhortó a orar para que los líderes involucrados actúen con responsabilidad y busquen el bienestar de sus pueblos y de la humanidad.