Quieren al Cerro El Tajo como Área Estatal de Protección Hidrológica
GUADALAJARA, Jal., 14 de julio de 2021.- De seguir el presidente de la república con sus arrebatos y la aplicación de sus políticas públicas, se podría complicar la relación bilateral entre México y Estados Unidos, coincidieron especialistas del Centro de Estudios sobre América del Norte del Centro Universitario de Ciencias Sociales y Humanidades (CUCHH) de la Universidad de Guadalajara.
Durante la presentación del balance del Tratado Comercial entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC) y la relaciones entre el mandatario estadounidense Joe Biden y su homólogo mexicano Andrés Manuel López Obrador, los doctores Arturo Santa Cruz Díaz Santana, director de estudios sobre América del Norte del CUCSH; Jorge Luis Chabat Madrid, profesor investigador del Departamento de Estudios del Pacífico del CUCSH y; los maestros Miguel Ángel Sigala Gómez, investigador del Centro de estudios sobre América del Norte del CUCSH y Miguel Alejandro Hijar Chiapa, investigador del Centro de estudios sobre América del Norte del CUCSH, coincidieron en que la relación entre ambos países no es la mejor en la actualidad, si se compara con la que se llevó con el anterior mandatario norteamericano Donald Trump.
A un año de la firma del T-MEC y a 6 meses del gobierno de Joe Biden al frente de los Estados Unidos, el doctor Arturo Santa Cruz Díaz Santana, destacó que la llegada del demócrata ha sido “para bien” a nivel internacional, tras la salida del republicano Donald Trump, mejorando la imagen y liderazgo de la unión americana.
“Paradójicamente, este parece no ser el caso en México, es decir, parecería que el gobierno que tenemos aquí, se asemeja mejor al anterior gobierno estadounidense, gobierno que como bien recordamos quería hacer de Estados Unidos grande de nuevo, con lo que convocaba explícitamente tiempos pasados, pues algo así parecer pervivir en el gobierno actual (mexicano), una pervivencia que encontró coincidencia, sobre todo en el discurso y en otros ámbitos también con el presidente Trump”, destacó.
El director de estudios sobre América del Norte del CUCSH, señaló que las políticas actuales mexicanas y la llamada Cuarta Transformación, parecen invocar más a las políticas de las décadas de los años 60 y 70 que al siglo XXI.
Por su parte, el maestro Miguel Ángel Sigala Gómez, habló del tema migratorio, mismo que se pudiera señalar como una gran etapa de migración desde la segunda guerra mundial y la última etapa del siglo 20, que en suma fueron unos 16 millones de mexicanos que emigraron a los Estados Unidos durante ese periodo.
En la actualidad, se estiman que unos 40 millones de mexicanos han migrado a los Estados Unidos, cambiando la demografía del país vecino del norte. Sin embargo, derivado de la pandemia y de las “malas políticas públicas y decisiones del gobierno actual”, se volvería a dar un repunte en la migración, en contraste con la segunda década del 2000, cuando –dijo- existían mayores posibilidades de vida en México.
“Hay razones para pensar que se pueda consumar (una tercera etapa de migración)”, señaló el catedrático al ejemplificar las deportaciones registradas en los últimos años por el cruce ilegal de mexicanos a los Estados Unidos, aunado al incremento de la pobreza y a la disminución de la clase media.
Por lo anterior y debido a que el ingreso de divisas por 800 mil millones de pesos anuales, Sigala Gómez cuestionó la versión del presidente Andrés Manuel López Obrador “que el incremento de las remesas es un logro. Eso habla de la debilidad de la dependencia que tiene México, económicamente de sus connacionales y de Estados Unidos.
Esto nos recuerda que el presidente y sus interpretaciones a modo, me parecen que no están contribuyendo a lo que ya se había logrado, cuando ya había una civilidad y cierta diplomacia entre ambos países. Ahora simplemente se está utilizando para complacer ciertos sectores de la población y para justificar políticas mal implementadas”, señaló.
Por su parte, el doctor Jorge Luis Chabat Madrid, habló del tema de seguridad y la cooperación que ha existido entre ambos países desde las décadas de los años 90, donde existieron “conflictos aislados” por temas principalmente de narcotráfico.
“Con la llegada del gobierno de López Obrador, ha habido una serie de conflictos, que derivan, desde mi punto de vista, en la visión alternativa que ha querido plantear el actual gobierno en el tema de seguridad, que prácticamente se resumiría en la frase popular que el señor presidente ha manejado de ‘abrazos y no balazos’. Esto es una política de no confrontación con el narco, que ha tenido resultados poco satisfactorios”, destacó.
Ejemplificó que la tasa de homicidios sigue al alza, con 28 homicidios por cada 100 mil habitantes, por encima de la registrada en sexenios anteriores, con cerca de 80 mil muertes acumuladas en lo que va del sexenio, también por encima de gobiernos pasados.
Recordó que, aunque durante el gobierno del Donald Trump, en el discurso, parecía ser bueno, existieron casos en los que existieron conflictos, tales como la fallida captura de Ovidio Guzmán, hijo del narcotraficante Joaquín Guzmán Loera, así como el asesinato de varios miembros, entre ellos niños, de la familia méxico-estadounidense LeBarón, así como la detención del general Salvador Cienfuegos, a quien López Obrador insistió en que debería ser enjuiciado en territorio mexicano.
“En este contexto, ha habido ciertas muestras de preocupación de parte del gobierno de los Estados Unidos, que ha sido muy prudente en no externarlas abiertamente”, destacó. No obstante, ha habido otras muestras como la declaración del jefe del comando norte de los Estados Unidos, que dijo que entre un 30 y 35 por ciento del territorio de México estaba controlado por el narcotráfico.
Aunado a ello –añadió Chabat Madrid- las constantes alertas de viaje a 11 estados mexicanos por parte de los Estados Unidos, “lo cual refleja la preocupación en la seguridad del país”, además de las desapariciones y los hechos violentos en varios estados como Guanajuato, Tamaulipas, Guerrero, Chiapas, entre otros, así como la intromisión del narcotráfico en las pasadas elecciones, “hechos que han hecho replantear la Iniciativa Mérida”.
Por ello auguró que habrán de existir presiones por parte del gobierno estadounidense hacia México por el tema de seguridad que no parece mejorar, sino empeorar, subrayó.
De la misma manera, el maestro Miguel Alejandro Hijar Chiapa, investigador del Centro de estudios sobre América del Norte del CUCS, habló de la política exterior y la relación bilateral entre México y Estados Unidos, la cual en el gobierno de Trump pareció ser cordial, más no así con el actual mandatario estadounidense. Ejemplificó la tardía respuesta de López Obrador al triunfo de Biden, justificando que se estaba esperando para que no le pasara como a él, argumentando el supuesto robo en las urnas en 2012.
Aunado a ello, ejemplificó la postura que el mandatario mexicano ha tenido en temas recientes como Cuba y otros menos recientes como Venezuela, Nicaragua y Bolivia.
“Hemos visto posturas diferentes, posturas divergentes, sin embargo, en el caso de Cuba, estamos viendo una narrativa muy estridente en el caso de México”, agregó.
De tal manera, ante este contexto, los catedráticos e investigadores coincidieron que de seguir con la aplicación de sus políticas y la justificación reiterado de sus hechos, López Obrador pondría en riesgo la relación bilateral con los Estados Unidos, toda vez que el mandatario estadounidense ha mostrado ser menos tolerante a este tipo de actos que su antecesor y a buscar recobrar el camino de desarrollo y liderazgo de la unión americana.