La Navidad en el hospital te enseña a revalorar: enfermera

GUADALAJARA, Jal., 24 de diciembre de 2020.- El fin de todo hombre es: amar, dejar un legado y trascender. La felicidad es el complemento ideal para llevar una vida plena, pero muchas personas señalan que esta felicidad se trata de hacer lo que más te gusta con el corazón.

Susy es enfermera general en el Hospital General de Occidente, detalló para Quadratín Jalisco que este año fue diferente, pues la enfermedad que golpea al mundo entero, le hizo entender que la solidaridad puede más que la indiferencia.

“La enfermedad en todas sus áreas, en todas sus magnitudes, siempre, siempre hará una diferencia. Nosotros como enfermeros o doctores, hace que te vuelvas humano, que sientas el dolor que ellos sienten. Este año, tan atípico me ha tocado ver a la muerte de cerca, enfrentarme con ella, y también perder y ganarle, no ha sido fácil”, puntualizó.

Para Susy, la enfermera roquera  (como se define), cada Navidad en el hospital tiene una temática diferente, lo que no cambia son los aprendizajes.

“Pasar Navidad y Año Nuevo en estos lugares te deja un aprendizaje de vida, el valorar lo que tienes, lo mucho que tienes, que es tu familia, que ropa, celular, regalos, eso realmente ya es un lujo. Hace un año me tocó la muerte de una persona mayor, y sus hijos decían: ‘ella era nuestro único tesoro y no supimos cuidar’. Híjole, entendí el tesoro invaluable que tengo en casa”, narró.  

Aunque es Navidad, con esta pandemia no descansará y seguirá combatiendo por la salud de las personas, pero para Susy, tener estas fechas a la vuelta de la esquina es sinónimo de que la lucha continúa.

“En años anteriores me había tocado pasar la Navidad apoyando en urgencias, te llega de todo, niños que con pirotecnia se queman, accidentes automovilísticos por exceso de alcohol, peleas a golpes. Todos los casos que llegan son tristes, más en las fechas en las que se suscitan, pero en este año, creo que a todos nos ha golpeado de la peor manera. Unos perdieron esta lucha y otras están o estarán peleando esta lucha, que tenemos fe, van a ganar”, señaló.  

Sin salud, no podemos hacer nada, de hecho poseerla en estos tiempos tan complejos es una bendición.

Susy, tendrá que pasar Navidad en el hospital, lo que significa un enorme sacrificio, pero al mismo tiempo la hace reflexionar sobre el valor tan enorme y especial que es tener una familia.

“Claro que me pesa no estar con mi familia el 24, pero cuando estoy con ellos, la fiesta es en grande, de hecho siempre he pensado que a veces nos fijamos en lo material; a ver si tengo dinero para comprarme esto en Navidad, voy a juntar dinero para hacer esto en Navidad o en otras fechas, pero sin salud, todos esos planes no se hacen, así lo anheles, no hay salud no hay nada”, explicó.  

El amor todo lo puede, todo lo sana, todo lo supera, así es como todos los días Susana, la enfermera rockera del Zoquipan protege a quienes han sido víctimas de la pandemia.

“Todo lo que hago, lo hago con mucho amor, pensando en que a mí también me gustaría que en momentos tan difíciles alguien esté acompañándome, alentándome. Soy fiel creyente que Dios se manifiesta en cada persona buena que nos topamos en la vida, son la imagen viva de Dios, y que al hacer el bien a ellos, se lo hacemos al padre, no me pesa pasar horas dentro del área, al contrario, cuando llegan mis compañeros a relevar no me quiero ir, porque hay tanta necesidad allá adentro, tanto dolor”.

Cada año, grupos de personas, de toda clase de creencias, llegan al hospital a llevar un poco de esperanza a quienes por circunstancias distintas están pasando por un momento desagradable, pero este año será distinto, la pandemia quizá frene muchas de estas actividades.

“Por la pandemia creo no habrá personas repartiendo alimentos o a lo mejor sí, pero con las medidas sanitarias correspondientes, pero cuando uno ve este tipo de labores ayudas, a mí me gusta regalarles aunque sea un bolo de dulces a los niños, porque, a veces la pasan mal con su enfermedad. Si les das aunque sea una paletita, nombre, quedan más que agradecidos los condenados, eso es lo que hace la diferencia, las pequeñas acciones, o las que muchos ven como insignificantes”, explicó.

Cuidar a quienes son sector vulnerable, como nuestros abuelos, embarazadas y personas con enfermedades crónicas es una responsabilidad que todos debemos asumir ahora con la pandemia para evitar que los hospitales se vean saturados y que los integrantes del sector salud se agoten de más.