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GUADALAJARA, Jal., 13 de diciembre de 2020.- De acuerdo con la tradición, quienes no alcanzaron a visitar a la Virgen de Guadalupe en su día, el 12 de diciembre, suelen hacerlo un día después, pero este domingo, en plena pandemia por el Covid 19, el escenario en el Santuario de Nuestra Señora de Guadalupe en Guadalajara fue muy diferente.
Todavía cerca del mediodía, elementos de la policía estatal y de Protección Civil estuvieron retirando algunas vallas metálicas que fueron utilizadas en el operativo del sábado y los anuncios de entradas, salidas y desviaciones.
Y aunque la plazoleta principal estuvo casi sola, en el atrio del Santuario sí había una fila mediana de fieles esperando poder ingresar a saludar a la morenita.
En el templo aún permanecen los arreglos florales que cientos llevaron a La Guadalupana en su día, y personal de este lugar se mantiene muy atento al control de los ingresos, los aforos y los protocolos para evitar contagios de la enfermedad.
Los tradicionales puestos de buñuelos con miel abrieron tarde, casi a las 12 del mediodía, un tanto desanimados porque las ventas no se acercaron ni un poco a lo que suele ser por esta festividad religiosa.
Los que no descansan ni siquiera en domingo son los vendedores de medicamento en esta zona ya que estaban muy activos abordando a quienes llegaban a pie o en vehículo a este lugar.