¡¡¡PLOP!!!
PAÍS ROJO
Todo el territorio mexicano está en semáforo rojo. Excepto Zacatecas, que va para allá.
El destino estadístico nos alcanzó y las predicciones fueron insuficientes. Ya hemos insistido en esta semana sobre la confusión a la que está sometido el ciudadano cuando el Gobierno Federal, la autoridad máxima en la materia, erró sus predicciones, falló en sus previsiones sobre la nueva normalidad, equivocó la estrategia y enredó a todos.
También hemos advertido sobre el apetito insaciable de imagen pública de algunos Gobernadores, que, por ganar popularidad ante la difusa imagen del Ejecutivo federal, lanzaron cruzadas de confinamiento desde hace varios meses, a las que los ciudadanos acudieron, persuadidos de que si el Centro se equivocaba, la periferia lo hacía bien. Ambas partes se precipitaron, unos en el estira, y otros en el afloja. Ahora la población queda indefensa, a merced del virus que demuestra a propios y extraños que crece exponencialmente, y queda atrofiada ante la parálisis de la economía, que amenaza con ser aún más mortífera que el propio virus.
Dramática situación en la que, para ponerle el muy tapatío condimento del limón a la herida, Andrés Manuel López Obrador señala que es tiempo de volver a la actividad normal y anuncia que reanudará sus giras. Ya en la entrega de ayer comentamos que la fecha del pico máximo de la pandemia se estima por allí del final del mes próximo.
En consecuencia, permítame la profunda cita de aquel notable filósofo popular que se diera a conocer en la no menos profunda televisión mexicana: «¿Y ahora quién podrá defendernos?».
La declaración de Hugo López-Gatell en este sentido no podría ser más desafortunada: nuestro show man científico nos advierte que la epidemia va a seguir y los contagios también, con el agravante de que posiblemente alcancemos un repunte para el mes de Octubre.
¿Y los empresarios que siguen el modelo Salinas Pliego? ¿Van a llamar ya a filas a sus empleados y a reanudar labores como de ordinario? ¿Los ciudadanos disciplinados seguirán confinados hasta que el estado anímico, el cuerpo y la cuenta bancaria aguanten? ¿Aquellos que necesitan salir para conseguir el pan de cada día, estarán jugando a la ruleta rusa? Y en medio de todo esto: ¿hasta dónde va a dar la infraestructura hospitalaria?
Por ahora estamos en el octavo lugar, del dudoso top ten entre los países con más casos y mayor número de defunciones. Es posible que saltemos algunos lugares hacia el top cinco, antes de que la curva por fin se aplane.
PINTA SU RAYA
Cada vez se observa más un rompimiento del Gobierno de Jalisco con el Gobierno Federal, y ahora hasta los gobernadores de otras entidades –que en anteriores ocasiones ya habían dado señas de desacuerdos- se unieron a él.
Primero, la mañana de este viernes Enrique Alfaro llamó cínico al subsecretario Hugo López-Gatell, por colocar a Jalisco en el mapa rojo, cuando señala el mandatario que son más los colores verdes y amarillos los que tiene la entidad en cuanto a indicadores Covid 19.
A esta petición se le unieron más tarde los gobernadores de Colima, Coahuila, Nuevo León, Tamaulipas, Michoacán y Durango, quienes luego de una reunión, reclamaron el que no se les tomara en cuenta para la decisión de esos semáforos federales.
No es lo mismo que los gobernadores en lo individual externen sus molestias y diferencias, a que se unan para advertirle a la federación que no están de acuerdo en sus determinaciones, esto sí levanta más polémica.
Lo cierto es que algo está fallando en la política de comunicación por parte del Gobierno Federal. Además del indiscutible nivel de protagonismo político de Alfaro, también se observa que el gobierno de México, no cuenta con un interlocutor que aclare dudas y acciones en torno al tema del Covid 19 o con un operador político que calme los ánimos en Jalisco.
TODO POR EL 10 DE MAYO
En Jalisco nos valió el Día de las Madres y hoy lo estamos pagando. Este viernes tenemos el mayor número de casos de Covid 19 en el Estado: 159. Es una cifra histórica.
Lamentablemente por más llamados de todos los alcaldes, del Gobernador, de la policía, bomberos o quien se le ocurra, que pida #QuédateEnCasa no está funcionando.
El 10 de mayo fue evidente cómo las calles en domingo estaban abarrotadas de gente y carros. Había largas filas en las avenidas y tráfico a vuelta de rueda.
Sabíamos que las consecuencias serían graves y así ocurrió en estos días y hoy fue más evidente.
Desafortunadamente la gente cada día cree menos en la pandemia.
Enfadados por la cuarentena vieron en estos días abiertos los restaurantes-bar y corrieron a distraerse.
En redes sociales muchos denunciaron que estos lugares lejos de operar al 50 por ciento, permitieron que la sana distancia se rompiera. Abarrotaron la establecimientos.
Esto sin duda nos cobrará factura en 15 días más. Ya nos amenazaron (si así lo quiere ver), con que la reapertura no se va a dar este lunes como todos esperábamos. Nos piensan recorrer 15 días más y muchos comerciantes que ya veían la luz al final del túnel, una vez más se ensombrece por una piedra enorme, la de la irresponsabilidad.
Así pagamos unos por otros. Muchos que en casa nos encerramos esperando darle un fin rápido y sin cobrar vidas, vemos como se va por al borda todo el esfuerzo por unos que no supieron aguantar más días en el encierro.