La Ahogada, el que la prueba se pica
INCESANTE CARESTÍA
Si usted, al contario de Enrique Peña Nieto, sí está al tanto de los precios de la tortilla y de muchos otros alimentos de la canasta básica, se dará cuenta del alza severa en los precios.
Si no está al corriente, permita a la Alianza Nacional de Pequeños Comerciantes (ANPEC), que nos asesore con sus monitoreos al respecto:
ANPEC monitorea los productos esenciales de la canasta básica semanalmente desde el arranque de la cuarentena; ha registrado un incesante aumento de precios en varios artículos: chile (62.5%), cebolla (59.09%), jitomate (45.45%), naranja (33.33%), papa (25%), limón (21.43%), aguacate (15.38%) y huevo (10.53%).
La danza de cifras da cuenta de la pérdida de poder adquisitivo: la comparación entre precios ha sido como sigue: chile ($40 a $65), cebolla ($22 a $35) y jitomate ($33 a $48), aguacate ($65 a $75).
Para esta organización, el manejo de la contingencia, que ha restringido el libre tránsito, ha afectado en el abasto en el territorio nacional, por lo que responsabiliza de esta carestía a los titulares de la Secretaria de Salud y Gobernación. Por si fuera poco, cada vez son más las autoridades locales que han decidido enclaustrar a sus comunidades, con la intención de protegerlas del Covid 19, estableciendo retenes que impiden el libre tránsito y obstaculizan de alguna manera el abasto al mercado local.
La elevación de precios ha sido constante, encareciendo cada vez más el costo de la vida. En la cuarentena abastecerse de lo esencial exige mayor esfuerzo, el dinero no alcanza, debido a que los ingresos de muchos hogares han caído dramáticamente. Los precios de los productos suben incesantemente y los ingresos familiares han caído inesperada y desesperantemente.
Otros artículos que ven sus precios hasta las nubes son el aceite (15.38%), el jabón de lavandería (10.34%), el jamón (9.38%), el desinfectante en aerosol (8.97%), el papel higiénico (8.33%), el cloro (7.14%), y las latas de atún (6.25%).
Por supuesto, y adivinó usted, que también los cielos son el límite de artículos que de la noche a la mañana se volvieron indispensables como lo son los cubrebocas, que fluctúan a precios insospechados y el gel antibacterial que ha alcanzado $79 pesos en promedio, por cada medio litro.
Las compras de pánico provocaron también especulación y alza desproporcionada de precios de algunos de estos artículos, en particular los de limpieza e higiene, minando el poder de compra. Especular en las actuales condiciones merecería una legislación emergente.
Un factor que ha servido son las denuncias de los consumidores en las redes sociales. Hasta cierto punto. La factura económica del Covid 19 ha llevado a nuestra economía a la recesión, y revertirla costará mucho trabajo.
2020 es un año perdido; 2021 un año muy comprometido, y en 2022, si hacemos la tarea, igual empezaremos a mover la economía, pero solo lo lograremos si somos capaces de actuar coordinadamente como sociedad.
Para la ANPEC el decreto para la emergencia sanitaria no establece un toque de queda, ni debería limitar el libre tránsito que garantice el abasto. Queda la reflexión ante el delicado equilibrio que debería conseguir las autoridades de las Entidades en el país, entre garantizar el abasto para permitir que la escalada de precios se reduzca, y proteger a la población en la contingencia.
OJALÁ QUE LOMELÍ SEA SINCERO
Vaya sorpresa que dio el doctor Carlos Lomelí con el anuncio que hizo de obsequiar 5 mil pruebas rápidas para Covid 19 al gobierno de Enrique Alfaro Ramírez, quien fuera su más férreo enemigo político cuando fue candidato a la gubernatura de Jalisco.
Cuando el excandidato de Morena renunció en julio de 2019 a su delegación del gobierno federal en Jalisco, por presunto involucramiento de su empresa Lomedic en una supuesta red de comercios que vendían medicamento al Gobierno federal, Alfaro se pronunció porque “las investigaciones lleguen hasta las últimas consecuencias” y dijo que ojala “una simple renuncia no genere perdón y olvido”.
Pareciera que esos tiempos de dimes y diretes, de desacuerdos políticos, acusaciones y de peleas quedaron atrás, ahora dice Lomelí que son tiempos de hacer a un lado colores y filias partidistas. ¿Será?
Ojalá que la pretensión del doctor Lomelí sea sería y sincera, y no tenga escondido otro fin político, porque en estos tiempos tan difíciles, lo que menos necesitan los jaliscienses es que el tema del Covid 19, se tome como bandera política.
LE AGRADECE
Ante este loable gesto de Lomelí, Enrique Alfaro reveló que le llamó para agradecerle, como lo ha hecho con cada uno de los empresarios que pretenden poner su granito de arena en la lucha contra la pandemia.
Pese a ello, deja claro el mandatario que desconoce si las pruebas que ofreció el doctor están avaladas por los organismos internacionales para ser aplicadas. Destacó que esto ya lo revisará directamente su gente con Lomelí, pero sin duda no deja de agradecerle su ayuda.
REGRESO A CLASES HASTA AGOSTO
Sin duda la medida de no regresar a clases en este ciclo escolar puede resultar acertada para unos y desafortunada para otros.
Para los que les agrada la idea, señalan que sin duda ayuda mucho para evitar que se aglomeren los estudiantes en los centros educativos.
Permite que evitar la movilidad del 36 por ciento de la población y así contener un poco más la circulación.
En otro sector de padres de familia, no lo ven favorable porque muchos no tiene el tiempo para poder sentarse con sus hijos a que estudien en las plataformas o para que realicen la tarea; además, sienten que ya necesitan salir a jugar y compartir un buen rato con sus compañeros.
Si bien es cierto que el encierro para los menores es más complicado, no queda más que esperar hasta el 24 de agosto para que vuelvan a las aulas, que cabe señalar que no serán todos de un jalón, la intención es hacerlo de manera escalonada. Sin duda no será igual la escuela. Los grupos serán reducidos y tal vez (esto sigue en análisis) no vayan todos los días a clases presenciales.
El cambio que originó esta pandemia será muy significante en todos los sectores. En la ciudadanía aprenderemos a vivir de una nueva forma, una que nos pide ser más precavidos y con una higiene inmaculada.