Rescatan a bañista en playa de Puerto Vallarta
CIUDAD DE MÉXICO., 12 de noviembre de 2019.-Durante 2017, el 20% de los jóvenes entre 12 y 17 años vivieron alguna forma de ciberacoso, y las mayores tasas estatales de este fenómeno se registraron en Baja California Sur, Nayarit, Campeche y Baja California, lo anterior de acuerdo con el seguimiento al “Diagnóstico sobre la situación del abuso sexual infantil en un contexto de violencia hacia la infancia en México”, presentado por el think tank Early Institute, a través de ALUMBRA.
“Si bien, las nuevas tecnologías cuentan con muchas ventajas, resulta preocupante que el uso de las redes sociales implique una ventana de riesgo para niñas, niños y adolescentes”, señaló el Dr. Arroyo, miembro del Consejo Consultivo e investigador de Early Institute.
Dentro de los datos sobre los agresores, se encontró que el 58% fue un desconocido, el 16% un compañero de clase o trabajo, el 14% un amigo, el 10% un conocido, el 2% una expareja y el 1% un familiar.
A un año del lanzamiento de ALUMBRA, proyecto colaborativo enfocado en prevenir la violencia sexual infantil, Early Institute alertó que en México no existe una fuente de información concreta que permita medir la violencia sexual infantil a nivel nacional, a pesar del grado de vulnerabilidad que enfrentan los niños y niñas.
El panorama es preocupante. Los delitos sexuales a nivel general tuvieron una tasa de crecimiento de 63% en un periodo de cuatro años, al comparar los 38,357 registrados en el periodo de enero a septiembre del 2019, con los 23,575 registrados en el mismo lapso de 2015. Tan sólo a nivel nacional en el 2018 se registraron más de 41,900 delitos sexuales, el 44% fueron de abuso sexual, lo que representa un total de 18,595.
Sin embargo, estas cifras no segmentan en cuántos de estos delitos las víctimas son niñas, niños o adolescentes.
El seguimiento del Diagnóstico detectó que más allá de la clasificación de delitos sexuales, existen otros delitos que incluyen temas sexuales y no son incluidos en este rubro, como el feminicidio, la corrupción de menores o la trata de personas.
Sobre estos, durante el año 2018, el feminicidio tuvo un incremento de 20% respecto a 2017, registrando 920 víctimas de las cuales 87 fueron menores de 18 años. En cuanto a la corrupción de menores, ese mismo año se registró un total de 1,393 víctimas, de las cuales el 69% son del sexo femenino.
“Es especialmente preocupante la situación en estados como Nuevo León, Chihuahua y Nayarit, cuyas tasas de víctimas por cada 100 mil habitantes menores de edad se encuentran en los primeros cinco lugares en más de uno de los delitos antes mencionados” agregó el especialista.
Dentro de la información obtenida, se encontró que el número de egresos hospitalarios de menores de edad por algún tipo de violencia en general también registró un aumento. Mientras que en 2016 se registraron 357 casos de este tipo, en 2017 se registraron 464, implicando una tasa de crecimiento de 30%.
En 2017 la cifra de niños, niñas y adolescentes que requirieron atención hospitalaria por abuso sexual infantil fue de 281 casos. Las entidades en donde se encuentran más casos por cada 100 mil habitantes es en Sonora, Querétaro, Tlaxcala, Hidalgo, y Ciudad de México. Además, la posibilidad de que una niña sea hospitalizada por abuso sexual es 5 veces mayor que la de un niño.
En lo referente a los egresos hospitalarios por infecciones de transmisión sexual en menores de edad, se registró un total de 774 en 2017. Los estados con mayores tasas fueron Baja California Sur, Ciudad de México, Colima, Yucatán y Quintana Roo.
“Los resultados son alarmantes, la violencia sexual en contra de la niñas, niños y adolescentes nos motiva a actuar con prontitud, así como a implementar mecanismos de medición y prevención puntuales, con el propósito de erradicar esta problemática”, afirmó el Dr. Mario Arroyo.