Coinciden candidatos en poca autoridad de México para responder a Trump

TIJUANA, Baja California, 20 de mayo de 2018.- En punto de las 21:30 horas (hora centro) arrancó el Segundo Debate entre los cuatro candidatos a la Presidencia de la República, Andrés Manuel López Obrador, José Antonio Meade, Ricardo Anaya y Jaime Rodríguez Calderón, moderado por los periodistas Yuriria Sierra y León Krauze.

Este debate en la Universidad Autónoma de Baja California (UABC) campus Tijuana como sede, abordará tres temas en específico: comercio exterior e inversión, seguridad fronteriza y combate al crimen transnacional, y derecho de los migrantes.

Por primera vez, el ejercicio democrático en el que los contendientes confrontarán ideas y propuestas durante una hora y 37 minutos, contará con un inédito formato en el que están presentes 42 mexicanos que fueron elegidos de una muestra representativa aleatoriamente, los ciudadanos están inscritos en la Lista Nominal de Electores, no han decidido aún su voto y tienen la intención de acudir a las urnas el próximo 1 de julio.

Como primer aspirante en intervenir en el Segundo Debate Presidencial, el candidato independiente Jaime Rodríguez, El bronco, señaló que hay que hablar más fuerte con Donald Trump.

En su oportunidad, Andrés Manuel López Obrador habló de fortalecer la economía para que haya trabajo en México ante la necesidad de emigrar, y aprovechar la relación de comercio con Estados Unidos.

Ricardo Anaya reprochó haber recibido a Donald Trump durante su época de campaña, a quien acusó de dedicarse a aplastar a México, por lo que advirtió que defenderá en interés nacional.

Ante el cuestionamiento sobre cuáles serán las acciones concretas para reorientar el comercio, Meade reiteró que no permitirá ningún acuerdo que no esté basado en el respeto, porque esa es la base de cualquier diálogo y relación comercial.

Ante las ofensas de Donald Trump, López Obrador aseguró que se necesita autoridad moral ante el republicano.

Dijo que está de acuerdo con el presidente de Estados Unidos en que los políticos de México son corruptos.