En entrevista, la directora del DGTPA, Elisa Lavore Fanjul, comentó que la mayoría llega por el delito de robo con violencia, homicidio, violación y secuestro son los otros que más se representa en las detenciones y reclusiones.
“Tenemos alrededor del 13 por ciento por reincidencia por internamiento que ya habían cometido un delito, tenemos una cifra negra que tenemos que revisar para ver qué tan funcional es esto y el reto es de cruzar información con los Reclusorios para saber cuántos salen de comunidades se van a reclusorios.
“El principal delito, con 70 por ciento es robo, en internamiento robo con violencia y en externación robo, de alto impacto estamos hablando de un 28 o 30 por ciento por homicidio y el resto está por violación o secuestro”, dijo Lavore Fanjul.
Mientras que la población femenil cuenta con nueve y un bebé, mientras que en externación se tiene 25 y que las coloca muy por debajo de la población varonil en esta Dirección.
En tanto que en los varones se contabilizan a 137 en internación y 340 fuera de las instalaciones que cumplen con algún tipo de servicio social por sus actos.
La funcionaria destacó que de junio a la fecha han tenido un descenso en los ingresos de menores, además de que se ha tenido, también, una disminución en la velocidad de detenciones y se ha hecho de manera gradual.
“Las adolescentes que tenemos son nueve y un bebé en internamiento y en externación son 25, pero es mínima la población de mujeres, mientras que de varones tenemos 137 y en externación como 340 aproximadamente.
“Hemos tenido muchos egresos del periodo de junio a la fecha bajo un 50 por ciento nuestra población en internamiento y aumentó los que están en medidas alternas, libertades absolutas no son tantas, más bien, los chicos pasaron a estar en una medida no privativa de libertad”, comentó.
La directora del DGTPA aseguró que no se tiene registro de que algún caso un menor de edad esté vinculado con el crimen organizado, por lo que no le genera una doble labor de trabajo de readaptación como en otros estados.
Además de que su población se encuentra en la media de 16 y 17 años de edad, aunque a finales de año podría variar está numeralia cuando se crucen datos con el Sistema Penitenciario.
“Tenemos un grueso de población de entre 16 y 17 años, no podemos hablar de una cifra estimada de las edades.
“La ventaja que tenemos en Ciudad de México es que no tenemos presencia de que los menores tengan vinculación con organizaciones de delincuencia trasnacional como los Zetas o el Cártel del Golfo, a diferencia de otros estados que si tienen el reto de trabajar con esos perfiles, lo que sí puedo decir es que estábamos en el lugar seis o siete de más a menos en el ranking de internamiento”.
Finalmente, descartó que exista el fenómeno de sobre población en sus instalaciones de San Fernando, al sur de la ciudad.