El pugilista mexicano inició con todo en el primer asalto, buscando lastimar al uzbeko; sin embargo, la movilidad de su rival provocó que se comiera algunos golpes al rostro, por lo que las tarjetas fueron a favor de Melikuziev.
Con buenas combinaciones de derecha e izquierda, el Chino intentó recuperarse en el segundo round, pero al dejar la guardia abierta, permitía que Bektemir entrara con rectos, sumando puntos a su favor y volvió a llevarse las tarjetas.
Con la misión de finalizar a su rival, inició Rodríguez el tercer capítulo, presionado por conseguir el nocaut, pero la experiencia de su oponente fue mayor y se dedicó a esperar y contraatacar con contundencia.
La pelea terminó a favor del uzbeko por decisión unánime y Misael se bañó en bronce.