GUADALAJARA, Jal., 8 de Julio de 2016.- Bantú, el único gorila macho en el País, la esperanza de una especie, se fue.
Ni 20 médicos a su lado pudieron salvarle la vida. Bantú era preparado para viajar al Zoológico de Guadalajara en busca de reproducirse, pero no alcanzó a salir de su casa, el Zoológico de Chapultepec, lugar que lo vio nacer y crecer.
En Guadalajara festejaría su cumpleaños número 25, el 20 de septiembre, quizá con una novia a su lado y pronto una familia; esa era la idea de sus cuidadores, pero él siempre tuvo la última palabra. Así lo hizo cuando intentaron aparearlo con una hembra del Estado de México, pero no le gustó al gran ejemplar de 220 kilogramos de peso y 1.75 metros de altura.
A Jalisco venía a reproducirse con una de las dos hembras que hay en la capital tapatía. Bantú sufrió un paro respiratorio, pese a estar atendido por especialistas de los zoológicos de Chapultepec y Guadalajara.