GUADALAJARA, Jal., 9 de Junio de 2016.-Según información difundida por la agencia informativa EFE, el cardenal emérito, Juan Sandoval Íñiguez, confirmó en una entrevista que en la Casa Alberione de Tlaquepaque, eran recibidos los sacerdotes señalados por pederastia.
Se sabe que el lugar, creado por Juan Jesús Posadas Ocampo, es una casa de descanso para sacerdotes con problemas de alcoholismo, depresión o con problemas de autoridad, que de origen albergaba a aquellos señalados por delitos sexuales contra infantes, según las declaraciones del cardenal emérito.
La Casa Alberione es atendida por monjas de la orden Pías Discípulas del Divino Maestro, y ofrece apoyo de psicólogos, médicos y psiquiatras.
Sandoval agrega que en el año 2001, el Papa Juan Pablo ll ordenó que no se encubrieran más estos casos, por medio de una carta que envió a los obispos en la que además, clasificó la pederastía como un pecado grave y que ameritaba la expulsión de los sacerdotes del ministerio.
Según cuenta, cuando él estuvo en el cargo como cardenal, dispuso que la Casa Alberione no refugiara a ningún sacerdote pederasta. Y afirma que ninguno de los ahí albergados continúa con esa conducta pues «Un pederasta no (puede ser aceptado), primero porque nos va a dañar la obra y segundo porque de todas maneras tiene que dejar el sacerdocio, ¿para qué estamos ya gastando en él?».
También confirmó que en sus 17 años al frente de la Arquidiócesis, sólo tuvo conocimiento de un caso y el sacerdote terminó en la cárcel, aunque después fue liberado por la edad.