Aplaza juez indefinidamente sentencia de Trump por caso de Stormy Daniels
Guadalajara, Jal., 25 de abril de 2016.- Carlos Sada dice sentirse como caballo en el arrancadero, “con toda la adrenalina” para llegar a Washing-ton en los primeros días de mayo. El nuevo embajador mexicano ante el gobierno de Barack Obama maneja un tono suave, pero es directo con la encomienda del presidente Enrique Peña Nieto: “México no será utilizado como punching bag de los intereses de nadie en Estados Unidos”.
El señalamiento está relacionado con los ataques de Donald Trump, aspirante a la candidatura presidencial republicana, y a los políticos que cada cuatro años la toman contra México y los mexicanos para alimentar sus campañas electorales, según publica El Universal.
El diplomático no puede ocultar su felicidad porque tuvo un proceso terso de ratificación en el Senado y “no hubo votos en contra. Eso habla de corresponsabilidad”. Y también porque rompió la marca en obtener el plácet del Departamento de Estado. En ocho días tenía el beneplácito de la diplomacia estadounidense en la bolsa.
Por eso mismo, en entrevista con El Universal expresa su desacuerdo en que no haya embajador de Estados Unidos en México y que el Senado estadounidense no haya ratificado la designación de Roberta Jacobson. “(Se) debilita la interlocución de los gobiernos”, suelta.